Eólica
Las turbinas convierten la energía del viento en energía mecánica y eléctrica. Esta fuente de energía tiene el inconveniente de ser inestable por lo que las plantas eólicas necesitan baterías, cuyo precio está sin embargo disminuyendo continuamente. Las zonas más expuestas al viento son el Magreb y las zonas costeras del océano Atlántico y del océano Índico. Otros países disponen iguales de buenas condiciones de viento, como Etiopía y Kenia, que está construyendo el mayor parque eólica de África en la zona del Lago Turkana (300 MW).
Solar
Gracias a la fuerte radiación solar en todo el continente, el potencial de África en energía solar es enorme. Se apostó tradicionalmente por los paneles fotovoltaicos usados en grandes plantas pero también en mini-redes o en sistemas fuera de la red (como las lámparas solares). Pero también existen sistemas de energía solar térmica que absorben el calor del sol para calentar el agua y así reducir el consumo de electricidad tanto en los hogares como en el sector industrial.
Bioenergía
Cerca del 80% del consumo de energía en África subsahariana proviene de la biomasa tradicional como la madera aunque el uso de este recurso es generalmente no sostenible y provoca desforestación, desertificación y problemas de salud. Múltiples iniciativas promueven hornos mejoradas para obtener una mayor eficiencia energética. Por otra parte, residuos de plantaciones como la caña de azúcar sirven de combustible en plantas de cogeneración (vapor + electricidad). Finalmente, existe potencial energético con el biogás, producido a partir de residuos orgánicos o excrementos animales.
Hidráulica
Según el IRENA, sigue siendo la fuente de energía renovable más barata. Algunos países están apostando por mega-proyectos controvertidos, como Etiopía, que construye una presa sobre el río Nilo, lo que provoca conflictos con Egipto y Sudán por la modificación prevista del caudal. Los proyectos de gran escala de la República Democrática del Congo también preocupan por los impactos medioambientales que pueden tener. Pero el continente tiene también un gran potencial para proyectos hidráulicos de pequeña escala.
Geotérmica
La energía geotérmica es el calor contenido en el subsuelo al cual se accede a través de pozos. Este calor transforma el agua en vapor que, a su vez, es convertido en electricidad. La temperatura del subsuelo aumenta con la profundidad del pozo. Según la ONU, el valle del Rift en el este de África (Etiopía, Kenia…) es una zona particularmente idónea para aprovechar esta fuente de energía que tiene un potencial de 20.000 MW en todo el continente. Este potencial está sin embargo infraexplotado debido a la falta de mano de obra cualificada.